Muy poca gente le presta la atención necesaria, pero la redacción del contrato de alquiler de un inmueble es un paso crucial para evitar posibles problemas o conflictos futuros con los inquilinos.
A continuación, te damos las claves necesarias para que tu contrato sea infalible.
Los apartados que no pueden faltar en cualquier contrato de alquiler
Aparte de ceñirse a lo establecido en la Ley de Arrendamientos Urbanos, los contratos de alquiler de inmuebles es recomendable que cuenten siempre con ciertos apartados o puntos básicos, en los que habrá que incluir la máxima información posible:
Identificación de las partes
Se tendrán que reflejar los datos personales tanto del arrendador como del arrendatario, es decir:
- Nombres.
- Apellidos.
- Documentos de identidad.
También es aconsejable que figuren aquí todas las personas que van a residir en la vivienda, si tienen más de 18 años.
Información del inmueble
En este punto añadiremos la dirección completa de la vivienda, incluyendo el código postal, la localidad y también su referencia catastral.
Duración e importe del alquiler
Llegamos a una de las partes más relevantes de cualquier contrato de alquiler, en la que se especifican el importe y la duración estimada del mismo. Se deberá fijar:
- Fecha exacta de inicio del contrato.
- Importe mensual.
- Cuantía de la fianza que debe abonar el arrendatario.
Derechos y obligaciones
En los contratos, los derechos y las obligaciones se detallan mediante diferentes cláusulas, cada una de ellas dedicada a una temática concreta.
Divide adecuadamente los temas para que, en caso de que sea necesario consultarla, la información esté más localizable. Además, la redacción de esta parte del contrato debe ser especialmente clara y comprensible.
Entre los temas que se suelen tratar siempre encontramos los siguientes:
- El derecho del propietario a cobrar todas las mensualidades.
- La obligación del propietario de llevar a cabo las adecuaciones que sean necesarias para hacer la vivienda habitable.
- La obligación del inquilino de abonar cada mensualidad a tiempo.
- Los plazos establecidos para el pago.
- La responsabilidad de quien habita el inmueble de mantenerlo en buen estado y de efectuar los pequeños arreglos derivados de su uso y disfrute.
Otros consejos adicionales para que nada falle
Además de redactar adecuadamente el contrato, con las cláusulas más importantes, es buena idea que sigas estos consejos extra:
- Opta siempre por contratos por escrito: acordar las cláusulas solo de manera verbal es arriesgado.
- Firma y pide al inquilino que firme todas las páginas del contrato: esto dificultará que se pueda modificar su contenido digitalmente.
- Incluye fotografías del estado del inmueble: así, podrás demostrar cuáles eran sus condiciones iniciales si encuentras algún desperfecto más adelante.
- Haz inventario y añádelo en el contrato: si la vivienda está amueblada, lista los electrodomésticos y muebles que la componen y especifica su estado.
En Avanza Homes nos podemos hacer cargo de todo el proceso del alquiler de tu inmueble, para que tú no tengas que preocuparte por nada. Si quieres evitar que haya errores o falten datos en tu contrato de alquiler, ponte en contacto con nosotros y olvídate del papeleo.